jueves, 27 de marzo de 2008

P.H.S. Programa de Habilidades Sociales (II)

Foto editada por rasbcn

"Los componentes instruccionales y las técnicas de entrenamiento de los programas que hemos elaborado derivan de los procedimientos, principios y leyes del modelo conductual. Las leyes de condicionamiento, discriminación y generalización son la base de la mayor parte de los principios de entrenamiento de habilidades en nuestro programa: reforzamiento, moldeamiento, modelado, control de estímulos y generalización. Y de estos principios se derivan los procedimientos de instrucción utilizados: programación, análisis de tareas, reforzamiento positivo, reforzamiento diferencial, y otros.

Las características generales del programa han seguido el enfoque de Análisis de Conducta propuesto por Rusch y Mithaug (1980):
  1. Procedimientos de entrenamiento y manejo de conducta replicables.
  2. Entrenamiento individualizado.
  3. Observaciones directas y medida de las respuestas.
  4. Evaluaciones repetidas.
  5. Análisis objetivo, incluyendo cuantificación.
  6. Tratamiento de las conductas prevocacionales implicando tres fases: adquisición, mantenimiento y generalización.
  7. Centrarse en las habilidades sociales y vocacionales requeridas en la comunidad.
  8. Aceptabilidad social del esfuerzo programático general.
Una de las características básicas del currículum propuesto es la adecuación de las habilidades a la edad adolescente de los sujetos. Es preciso indicar que el PHS (Habilidades Sociales) y el POT (Habilidades de Orientación al Trabajo) sólo pueden abordarse a partir de los 12 ó 13 años, mientras que parte de las habilidades del PVD (Habilidades de la Vida Diaria) pueden y deben iniciarse a partir de los 6 ó 7 años. No obstante, al ir básicamente dirigido a deficientes y ligeros y medios, la simplicidad -complejidad de las habilidades varía en cada programa de unos objetivos específicos a otros.

La selección de las actividades instructivas y los materiales se ha realizado en función de la adquisición de los objetivos perseguidos. Estos objetivos fueron seleccionados en función de su relevancia para adquirir las habilidades necesarias para una integración sociolaboral adulta satisfactoria. Esto quiere decir que el currículum elaborado tiene una clara orientación hacia el futuro de los alumnos. ....

La generalización de los aprendizajes es uno de los aspectos claves del programa. Frecuentemente, los últimos objetivos operativos de cada objetivo específico consisten en habilidades generales que engloban distintas tareas y objetivos trabajados previamente.

Por un lado, se busca la obtención de secuencias comportamentales complejas, y por otro lado el mantenimiento y generalización de las habilidades a diferentes situaciones. Por ejemplo, en el Objetivo Específico 4.2 del PHS (Habilidades Sociales), el alumno aprende a utilizar su tiempo libre con juegos individuales (didácticos, colecciones, escuchando música), con juegos de mesa en grupo (cartas, parchís, dominó), saliendo con otros amigos, realizando una actividad física o deporte, asistiendo a una discoteca, etc. Tras el aprendizaje individual de unas competencias, los últimos objetivos plantean la planificación del tiempo libre del fin de semana, la asistencia a lugares públicos de ocio y diversión, y otros. En el PVD (Habilidades de la Vida Diaria), tras aprender separadamente el manejo de distintos cubiertos, la utilización de la servilleta y las conductas socialmente aceptables del comer, se introducen dos habilidades sobre el comportamiento en las comidas en una casa ajena y en un restaurante, que sirven como generalización de las conductas trabajadas previamente.

La generalización de los aprendizajes no sólo busca a través del tipo de ordenación de los objetivos, sino que forma parte de la propia secuencia de entrenamiento (Modelado-Instrucción-Feedback-Generalización) que más adelante se describe. De hecho, todas las habilidades posibles se entrenan primero en el aula y posteriormente en la comunidad. Por tanto, otra característica básica del programa es su constante referencia a la comunidad o entorno social, desarrollando gran parte de los entrenamientos fuera de la clase, en ambientes laborales, hogares, y dispositivos variados de la comunidad.

La implicación de los padres en el proceso de entrenamiento, especialmente en el PVD (Habilidades de la Vida Diaria) y PHS (Habilidades Sociales), es otra de las características del programa, que a su vez potencia la generalización de aprendizajes. ....

Las actividades instructivas que componen el programa exigen lugares de entrenamiento y materiales específicos distintos a los contenidos en las aulas habituales. El espacio físico ha de ser lo más similar posible a la situación real de ejecución de las conductas entrenadas.
  • Habilidades de Orientación al Trabajo (POT) debe realizarse en un taller profesional dotado de todos los materiales y herramientas necesarios para realizar las actividades educativas: bancos de carpintería, armario de herramientas diversas, materiales fungibles de madera y metal.
  • Habilidades de la Vida Diaria (PVD) se desarrolla en una casa real o simulada que contiene: habitación personal (con cama completa, armario, cómoda...), cocina y despensa (vajilla, alimentos, cubertería, útiles de limpieza...), baño completo (cepillo de dientes, desodorante, gel, etc.)
  • Habilidades Sociales (PHS) se desarrolla en una sala especial de usos múltiples, que permita la creación de distintos ambientes (cuarto de estar, calle, comercio, despacho, etc...) y la proyección de vídeos, diapositivas, y otros.
VERDUGO, M. A. (1997) P.H.S. PROGRAMA DE HABILIDADES SOCIALES. Programas conductuales alternativos. Salamanca: Amarú Ediciones. (Págs. 23 - 25).

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